RAMÍREZ: SITUACIÓN DE VIOLENCIA EN PALESTINA ES PRODUCTO DE LA PROLONGADA OCUPACIÓN ISRAELÍ

Nueva York 16 de octubre de 2015 (MPPRE).- Durante un debate convocado para este viernes en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, Rafael Ramírez, representante permanente de Venezuela ante las Naciones Unidas, expresó que la causa fundamental de la situación de violencia en los territorios palestinos ocupados es producto de la ocupación ilegal de Israel, que hoy casi arriba a 70 años.
Ramírez lamentó que: "la ONU casi desde su fundación, esté conociendo la cuestión Palestina, sin que a la fecha se haya alcanzado una solución política a este cruento conflicto. Esto es un hecho que debe llamar a la conciencia de todos, en particular, a los factores de poder decisorios que han trabado una solución política lo que ha provocado miles de víctimas, incluidos los refugiados en los países vecinos a los que se le niega el derecho al retorno".
El diplomático venezolano hizo referencia a la negativa del Estado de Israel de permitir a los palestinos su derecho de autodeterminación, con la constitución de un Estado soberano e independiente, lo que a su vez genera un espiral de violencia cíclica que trae consigo más víctimas en la población civil.
"La estrategia israelí es clara: provocar, agredir a los palestinos, para crear ciclos de violencia donde Israel, actúa brutal y desproporcionadamente contra el pueblo palestino para mantenerlo oprimido y reprimido, en un proceso de colonización que no cesa", aseveró el embajador Ramírez.
De igual manera, condenó las acciones violentas tanto a los lugares sagrados, como al personal médico y equipos de asistencia, las cuales han generado numerosos heridos y contravienen lo establecido en el Derecho Internacional y Humanitario.
Ramírez instó al Consejo de Seguridad a pronunciarse para "exigir a Israel que ponga fin a este nuevo ciclo de violencia y colocar a la población palestina bajo protección internacional, de conformidad con el Cuarto Convenio de Ginebra y la resolución 904 de este Consejo de Seguridad. Es necesario respaldar este llamado que hace Palestina para salvaguardar la vida de sus ciudadanos frente a las recurrentes y sistemáticas agresiones de la Potencia ocupante".
Venezuela reafirmó en el seno del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas el apoyo a la causa Palestina y a su derecho a la libre determinación, como se establece en el Carta de este foro multilateral, así como en las resoluciones emitidas por la Asamblea General y El Consejo de Seguridad en múltiples ocasiones.
A continuación el discurso del embajador Rafael Ramírez en el Consejo de Seguridad este viernes 16 de octubre de 2015, sobre la situación en el Medio Oriente, incluida la cuestión Palestina:
Señor Presidente,
La República Bolivariana de Venezuela sigue preocupada y condena enérgicamente la situación de violencia en Palestina. Queremos manifestar que la violencia que afecta los territorios ocupados no es consecuencia de los ataques de palestinos contra israelíes, o viceversa, sino el producto de la prolongada ocupación ilegal de casi 70 años que ha negado al pueblo palestino sus derechos humanos y el derecho a la autodeterminación.
Es lamentable que la ONU casi desde su fundación, esté conociendo la cuestión Palestina, sin que a la fecha se haya alcanzado una solución política a este cruento conflicto. Esto es un hecho que debe llamar a la conciencia de todos, en particular, a los factores de poder decisorios que han trabado una solución política lo que ha provocado miles de víctimas, incluidos los refugiados en los países vecinos a los que se le niega el derecho al retorno.
Israel, la potencia ocupante, persiste en su política de negar el derecho a la autodeterminación del pueblo palestino y a la existencia de un Estado soberano e independiente. Mientras persista la negación a los derechos palestinos, veremos la repetición cíclica de actos de violencia que sólo generan más víctimas dentro de la población civil y acrecientan la amargura, el dolor y la frustración de los jóvenes palestinos lo cual alimento de grupos extremistas que hoy en día azotan a varios países de la región.
La estrategia israelí es clara: provocar, agredir a los palestinos, para crear ciclos de violencia donde Israel, actúa brutal y desproporcionadamente contra el pueblo palestino para mantenerlo oprimido y reprimido, en un proceso de colonización que no cesa.
Por tal razón, repudiamos las recientes agresiones israelíes de las últimas semanas que han dejado un saldo lamentable de 34 fallecidos, la mayoría de ellos jóvenes entre 11 y 22 años, y más de 1400 heridos. Igualmente condenamos las recientes demoliciones de viviendas efectuadas por Israel en el territorio ocupado de Cisjordania, lo que ha dejado a cientos de familia sin hogar, siendo la mayoría de ellos niños que ahora se encuentran en situación de refugiados. Tales hechos forman parte de un proceso deliberado de expulsión y colonización por parte de Israel, sin que a la fecha se haya puesto coto a esta práctica ilegal.
Nos hacemos eco de la reciente denuncia de la Media Luna Roja Palestina en la que se indica que las fuerzas israelíes deliberadamente han atacado más de 53 veces las ambulancias y su personal médico y asistencial, generando una gran cantidad de heridos. Adicional a ello, tales ataques han resultado en la destrucción de 20 ambulancias, en contravención del Derecho Internacional Humanitario y el Derecho de los Derechos Humanos. El atropello no culmina allí, pues el mismo reporte señala que a más de 24 ambulancias con heridos les fue impedido el paso en dirección a los hospitales, lo que demuestra la política premeditada del gobierno israelí por causar un mayor sufrimiento del que ha generado durando las casi 7 décadas de ocupación ilegal.
Repudiamos la agresión a los lugares sagrados, tal como el acontecido contra la población palestina que asistía a la mezquita Al Aqsa en Jerusalén a manos de los colonos y las fuerzas de defensa de Israel. Estas acciones recurrentes violan el acuerdo alcanzado entre Israel y el Reino Hachemita de Jordania en su calidad de custodio de los sitios sagrados en Jerusalén oriental.
En Gaza, la crisis humanitaria no escapa de este escenario desolador. El brutal bloqueo al que son sometidos sus habitantes merma las capacidades de desarrollo económico y social. La falta de oportunidades y el vacío generado por la despiadada política israelí debe ser un motivo de preocupación de este Consejo y de la Comunidad Internacional. El objetivo de Israel es bien claro: dividir a los palestinos y hacer inviable la posibilidad de la existencia del Estado Palestino.
Nos parece repudiable e inaceptable la brutal campaña de asesinatos, persecución y encarcelamiento de Israel contra niños palestinos. Liberen a los niños palestinos, no disparen más contra niños y mujeres, esto es un acto brutal y cobardía contra inocentes que constituyen actos de terrorismo de Estado, crímenes de guerra y de lesa humanidad cuyos perpetradores deben rendir cuenta ante los tribunales internacionales.
El mundo sigue impactado por los efectos devastadores de la operación Escudo Protector cuyo ataque indiscriminado contra la población civil causó la muerte de a más de 500 niños, dejando también miles de niños y niñas discapacitadas y aún hospitalizadas. Muchos de ellos con un futuro truncado y sin la esperanza inmediata de retomar sus vidas y la construcción de un mañana promisorio. En Gaza, hasta la fecha, organizaciones humanitarias siguen reportando casos de niños y niñas con severos traumas psicológicos, muchos de los cuales persisten, a pesar de las atenciones y cuidados que reciben en centros asistenciales.
Resulta paradójico observar que luego que el Cuarteto desplegara sus buenos oficios para iniciar las conversaciones de paz, el gobierno israelí desatara esta nueva ola de represión, mediante la violencia generalizada que obstaculiza el camino necesario a una paz justa y duradera. Hacemos un llamado a este Consejo de Seguridad para que se pronuncie cuanto antes para exigir a Israel que ponga fin a este nuevo ciclo de violencia y colocar a la población palestina bajo protección internacional, de conformidad con el Cuarto Convenio de Ginebra y la resolución 904 de este Consejo de Seguridad. Es necesario respaldar este llamado que hace Palestina para salvaguardar la vida de sus ciudadanos frente a las recurrentes y sistemáticas agresiones de la Potencia ocupante.
La desesperanza que embarga a los jóvenes palestinos por no encontrar una solución política a la ocupación ilegal, es evidencia fehaciente de la necesidad de lograr una solución política negociada e incluyente. Las acciones recurrentes de Israel forman parte de una estrategia deliberada por negar los derechos de la población palestina a un Estado independiente, pues sólo la violencia justifica sus objetivos expansionistas y de dominación.
A este respecto, Venezuela reafirma su pleno apoyo al derecho a la libre determinación que asiste a los nacionales del Estado de Palestina, a vivir bajo fronteras internacionalmente reconocidas, de conformidad con la Carta de las Naciones Unidas y las resoluciones relevantes de la Asamblea General y el Consejo de Seguridad. El izado de la bandera del Estado de Palestina en el marco del 70 periodo de sesiones de la Asamblea General evidencia el compromiso de la mayoría de los miembros de esta organización a favor de los derechos inalienables del pueblo palestino.
Para finalizar, respaldamos todas aquellas iniciativas dirigidas al logro de una solución definitiva del conflicto. Es vital que el Consejo de Seguridad actúe con la celeridad y urgencia del caso para impulsar las negociaciones, teniendo en cuenta que la indefinición de este asunto afecta gravemente la paz y estabilidad del Medio Oriente.
Este Consejo debe asumir su responsabilidad, enfocarse en la resolución de este grave asunto que amenaza la paz y la seguridad.
Tenemos que actuar de manera honesta. Si de verdad creemos en la solución de Dos Estados, entonces este Consejo de Seguridad debe recomendar que Palestina sea aceptada en las Naciones Unidas como un Estado de Pleno Derecho.
Igualmente Sr Presidente, el Consejo podría emitir una Declaración Presidencial condenando la violencia israelí, que cesen los crímenes y provocaciones sobre los sitios sagrados. Y una resolución que ordene un proceso sostenible de paz.
Estamos convencidos Sr Presidente que este Consejo de Seguridad puede y debe hacer algo concreto y urgente por Palestina y su pueblo, desbloquear este asunto sería una paso valiente que acabaría con la impunidad y la prepotencia de Israel y allanaría el camino para reactiva conversaciones políticas entre Israel y Palestina.
Muchas gracias.

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